Una nueva era en Detroit

Iniciar nuevos proyectos no siempre es una receta que garantice el éxito, y es que, pese a que un nuevo comienzo implique en sí mismo la realización de tus objetivos, estos no siempre acaban de cumplirse. Que se lo digan a Blake Griffin y a los Ángeles Clippers.

Imagen vía freep.com

Ríos de tinta han corrido ya tratando de dilucidar cuáles fueron los motivos por los que la franquicia angelina no terminó de cumplir las expectativas. Muchos lo achacaron a las lesiones, otros a la posible mala relación entre Chris Paul y Blake Griffin, pero el objetivo de esta narración no es descubrir porqué su plan fracasó.

Lo relevante es que aquel proyectó terminó; finalizó con la marcha de Chris Paul a los Houston Rockets. Entonces se abrió un escenario complicado para los Clippers, dado que Blake Griffin terminaba contrato y este podía apostar por recalar en una franquicia ganadora.

Para la dirección de la franquicia angelina era reconstruir o dar continuidad a parte de la plantilla de la temporada anterior. Optaron por lo segundo, y pusieron toda la carne en el asador para renovar a Blake Griffin. Quizá el hecho de ser un equipo históricamente perdedor les pesó demasiado, tratando de evitar la presión de volver a empezar de cero.

Para convencer a Griffin, Lawrence Frank, jefe de operaciones de la franquicia, maquetó un vídeo en el que se repasaban con imágenes tanto su infancia como su carrera baloncestística al completo. Aquel vídeo terminaba con una simulación de la retirada de la camiseta de Griffin en la franquicia, y la frase “Clipper for life”.

Sin embargo, siete meses después, el periodista de ESPN y gurú predilecto de la NBA, Adrian Wojnarowski publicó la bomba: Blake Griffin se iba traspasado a los Detroit Pistons junto con Willie Reed y Brice Johnson a cambio de dos buenos titulares como Avery Bradley y Tobias Harris, además de Boban Marjanovic, una primera ronda (protegida top-4) y una segunda ronda del draft.

Detroit venía de una racha de ocho derrotas consecutivas que les estaba alejando de la zona de Playoff. Con la adquisición del ala-pívot norteamericano, los Pistons han apostado por ganar ya, tratando de escalar posiciones en la Conferencia Este. Por su parte, los Clippers se ven cada vez más avocados a la reconstrucción, aunque no renuncian del todo a ganar partidos.

Es difícil afirmar que uno de los dos equipos ha salido vencedor del traspaso, ya que ambos obtuvieron lo que deseaban para darle un nuevo aire a sus equipos.

La nueva era en Detroit no ha podido comenzar de mejor manera ya que los Pistons han ganado tres partidos consecutivos desde que Blake Griffin llegó a la plantilla. En esta racha, los Pistons promedian cerca de 107 puntos por partido, cinco puntos por encima de su media esta temporada. Además, su juego interior All-Star está promediando 40 puntos 25 rebotes y 9 asistencias por partido. Números descomunales.

Además, Drummond ha encontrado a un nuevo generador de juego desde la posición de ala pívot, hecho que le hará menos predecible y que les permitirá generar juego el uno para el otro. Los tiradores de los Pistons también están de enhorabuena, y es que jugadores como Kennard, Bullock o Tolliver se encuentran en un escenario idílico para explotar su potencial anotador. Ejemplo del potencial movimiento de balón del equipo son las 36 asistencias repartidas recientemente en el partido que les enfrentó frente a Portland Trail Blazers.

Con su reciente racha de victorias, los Pistons han igualado a los Sixers en la octava posición de la Conferencia, encontrándose a tan solo 3 partidos del quinto clasificado, los Milwakee Bucks. Todo ello sin Reggie Jackson, su base titular, del que se espera que vuelva de su lesión después del All-Star.

Es difícil medir cual es el verdadero potencial de estos Pistons, pero la realidad es que están exhibiendo un baloncesto que puede llevarlos al Playoff. Tampoco podemos afirmar que llegarán lejos en la postemporada, pero a buen seguro darán que hablar. Es el comienzo de una nueva era en la Ciudad del Motor.

Datos y estadísticas vía nba.com

Alen Martín Ortega

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