Vaya partidazo para empezar los playoffs de los Heat de Miami, que pone de manifiesto y nos obliga a recordar que Spoelstra siempre saca lo mejor de sus equipos en la postemporada. Victoria de mérito de los Heat contra unos Hawks que se han visto superados (115-91) desde el principio y en ningún momento tuvieron oportunidad de reaccionar debido al nivel físico impuesto por sus rivales.
El partido comenzó con Jimmy Butler de principal ejecutor, llevando el tempo del partido de forma excepcional y sabiendo gestionar los tiros. Estuvo acompañado principalmente por Duncan Robinson que, con 27 puntos y un 6/7 en triples, fue el percutor principal de los Heat. Además, el equipo de Florida planteó el partido de forma magistral para conseguir frenar a Trae Young, que lo dejó en 8 puntos (1/12 en tiros de campo). Y este hecho no hacía más que aumentar la distancia en el marcador.
Este partido fue un claro ejemplo de lo que puede ser esta serie y de lo que son los Heat: un claro candidato al anillo. Miami consiguió un 47% en triples (18/38) y dejando a sus oponentes en un pírrico 38% de acierto en tiros de campo. Atlanta necesita la vuelta de Clint Capela para tener un faro interior y que Trae Young consiga salir de la maraña que ha tejido Spoelstra a su alrededor, si no, la serie será corta.