El comienzo de Michael Porter Jr en la NBA no ha sido el sueño de cualquier adolescente que pretende ser una estrella, incluso cuando meses, o incluso años, antes de presentarse al draft, muchos lo incluían entre los tres primeros. Potencial y calidad le sobraban, pero de nuevo el infortunio con las lesiones hacia mella en unos de los proyectos de estrella más grandes en los últimos años en Estados Unidos.
Su particular calvario comenzó el día de su debut con los Missouri Tigers. A los dos minutos sufrió una lesión de espalda que le mantuvo fuera todo el año, jugando solo dos partidos en su primer año universitario (Georgia, en el torneo de Conferencia, y Florida State, en el March Madness). El calvario que había pasado durante todo el año parecía tocar su fin, pero nada más lejos de la realidad. Pese a no disputar apenas partidos para demostrar todo su potencial, nadie esperaba que fuera a caer por debajo del puesto nº 10, pero lo hizo. Nadie se fiaba de que pudiera ser ese jugador que meses atrás hacia presagiar que sería una futura estrella y solo los Denver Nuggets decidieron apostar por él en el puesto nº13.
Su primer año, el de Luka Doncic y Trae Young, se lo paso en la enfermería para poder corregir todos los problemas que tenía. Los Nuggets no tenían prisas y sabían que tenían en sus manos un posible All Star para el futuro. Este primer año no jugó ni un solo minuto, siendo esta temporada en la que ha empezado realmente su carrera NBA y en la que empieza a dejar atisbos del gran jugador que puede llegar a ser. Su comienzo no ha sido fácil. En el primer mes de competición apenas promedio 2,4 puntos en 7,7 minutos. Quien sabe si por miedo a volver a recaer o por precaución para que fuera conociendo el nivel de la competición. El caso es que ese miedo parece que ha desaparecido a tenor de lo que ha sucedido en los últimos partidos que ha disputado. Porter Jr ha subido sus promedios a 11,8 puntos, 5,7 rebotes, con un 60% en tiros de campo y un 46% en tiros de tres.
Este año lleva 34 partidos disputados con unas medias de 7,2 puntos y 3,4 rebotes en apenas 13 minutos en cancha. Al margen de los números, parece que ha recuperado la ilusión por jugar y, sobre todo, ha perdido el miedo a una posible recaída. Solo puede mirar al frente y seguir con su proyección para demostrar que en Denver no se equivocaron al elegirlo y que tienen en sus manos un gran jugador de futuro. Apenas tiene 21 años y un gran futuro por delante, si la espalda le respeta.
Porter Jr ha resurgido como el Ave Phoenix. Ha llegado a la mejor liga del mundo con miedo, pero este a desaparecido y parece decidido a ser una estrella. Podemos estar ante un nuevo “caso Joel Embiid” y lo que otros equipos decidieron no elegir, en Denver están muy ilusionados con el nivel que empieza a demostrar y que puede ser la estrella del futuro. Por el bien de todos esperamos que así sea y que nos deleite con su gran calidad en los próximos lustros. Ha venido para quedarse.