Hay jugadores que pasen los años que pasen, no dejan de sorprender, y en el momento de la verdad están ahí. Pueden caer mejor o peor, pero su calidad es innegable y dejan huella en los equipos en los que están.
Uno de esos jugadores es Chris Paul, pequeño base que con solo 1,83m de estatura ha establecido una marca histórica en el partido que permite a los Suns alcanzar las semifinales de su conferencia. La victoria frente a los New Orleans Pelicans supuso el pase a la siguiente ronda, y Paul hizo un inmaculado 14 de 14 en tiros de campo.
Esos tiros los repartió en 13 de 13 en tiros de 2, 1 de 1 de triples y sumó 4 tiros libres sin fallo. Eso supone un total de 33 puntos a los que añadió 8 asistencias y 5 rebotes en 36 minutos en pista. Una actuación histórica en Playoffs que ahora se verán las caras con los Dallas Mavericks de Luka Doncic y compañía.
Una eliminatoria que se supone será muy competida por ambos equipos y donde seguro que el base de los Suns tendrá mucho que decir para meter a sus Suns en la final de Conferencia. Le falta un anillo y parece que podría ser su año, pero la competencia es dura y deberá dar lo mejor de sí tanto Paul como el resto de compañeros.
Pase lo que pase, lo que nadie le quitará a Paul es ser el primer jugador en la historia de la NBA en llegar a los 20.000 puntos y 10.000 asistencias.