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Que negativo es ser agorero y vaticinar malos augurios, ser pesimista no es la mejor de las cualidades para obtener éxitos, el jugársela a una carta tiene sus riesgos y en esa situación se encuentra Avenida.
Desde el principio de temporada las señales que íbamos recibiendo del equipo perfumero eran difusas, grupo compacto, jugadoras de equipo, implicadas con el famoso ADN…
La realidad es que o mucho cambia la dinámica o la afición salmantina se va a quedar sin nada que celebrar por mucho que nos duela, entre otras cosas porque la dirección técnica no está dando con la «tecla» adecuada para llevar este barco a buen puerto.
Es evidente que quien paga manda, pero no por ello tiene que tener la razón absoluta ni hay que aplaudir sus decisiones si estas son equivocadas, y me temo que parte de las mismas no han sido las más acertadas.
Würzburg acogía la cuarta jornada de Euroleague Women con casi lleno en las gradas y muchas emociones encontradas, por una parte la llegada de Cazorla y Hof en el conjunto checo, recibidas con muchos aplausos por la grada; por otra Fasoula, tras su grave lesión fue homenajeada por todo el Pabellón lo cual le hizo saltar algunas lágrimas a la jugadora griega.
Praga se presentaba en Salamanca con un equipo muy físico Magbegor y Sabally, además de Conde y Vyoralova, buen equipo pero no invencible dada su baja rotación, si bien la dirección de Hejková era una ventaja por su gran experiencia y eso también contaba.
Las azulonas con la baja de Fasoula, llegaban con la ilusión de ofrecerle a su compañera un partido de entrega, lucha y corazón, con una afición detrás que siempre estará junto a ellas, pase lo que pase, eso no cambiará nunca.
Comenzó bien Avenida, Prince creciendo y creyéndose su rol, es una jugadora importante, sus compañeras lo saben y ella está en el proceso de adoptar su papel: ágil y rápida; hizo frente a jugadoras como Magbegor en la zona, se mostró muy activa y asumió el protagonismo durante gran parte del encuentro.
En esos momentos el acierto y sobretodo la defensa eran fantásticas, ahogando los intentos de las checas por imponerse en el marcador, un buen primer cuarto de las charras que permitían irse con una mínima ventaja 16-15, muy igualado pero con solvencia y por momentos imponiéndose al conjunto checo en intensidad.
Decía Pepe Vázquez que el equipo tiene que tirar con las 10 jugadoras que ahora mismo conforman la plantilla perfumera, hay que puntualizar que son 9 porque Lucía Rodríguez no cuenta para el técnico gallego, tampoco en Liga Femenina y la gestión debe comenzar desde ahí.
Hoy se destapó Sika Koné, de lo mejor de la noche, demostrando precisamente en Euroleague de lo que es capaz la maliense ante jugadoras con poderío físico superior al suyo, incansable e ilusionante ver a esta jugadora que con 20 años tiene un futuro impresionante.
En un segundo cuarto donde tanto Praga como Avenida intercambiaron golpes, comenzó el declive de las locales, incapaces de imponer un ritmo y una tendencia, las checas ya se empezaron a sentir cómodas, dominadoras del tempo del partido, extraordinariamente conducidas por Cazorla y Conde, muy acertadas de cara al aro.
Es evidente que jugadoras como Hartley y Delaere no están, su adaptación está costando y eso es un gran problema, sumados a otros que se perciben en el grupo, está constando meterlas en él y las dudas entre la afición están siendo cada vez más grandes, por cosas como esta el trabajo de Pepe se empieza a analizar y cuestionar.
Al descanso el electrónico reflejaba un 37-37, igualdad que también parecía verse en la pista, con un intercambio de golpes que hacían del choque un buen espectáculo para el espectador, con la incertidumbre de no adivinar el final.
La gestión de los minutos por parte del técnico gallego de Avenida no fue brillante, sin ideas, falto de recursos y muy preocupado por lo que veía, el equipo comenzó a descomponerse y las jugadoras hicieron la guerra por su cuenta, no había grupo, no existe una concepción del juego, la concentración desapareció y por otra parte Praga acertaba en su tiro exterior.
Eso condujo a las salmantinas a un terreno peligroso, ansiedad, decepción y precipitación, los tiros no entraban, los ataques eran imprecisos y mal orquestados, enfrente había un buen equipo y Avenida sufrió la cruda realidad, no tenía armas para hacer frente a un rival tan serio.
No es excusa la falta de una jugadora importantísima como es Fasoula, la plantilla de un equipo como este debe estar programada para imprevistos, ser capaz de sobreponerse a situaciones críticas, ya sucedieron en el pasado y se afrontaron con muchísimo sacrificio, ahora es diferente.
Lo sucedido durante el tercer y último cuartos fue un quiero y no puedo, jugadoras abatidas, enfadas y hundidas después de una noche aciaga, su esfuerzo fue encomiable, el desgaste tremendo, pero el conjunto no convenció a nadie porque lo que se transmite es poco alentador.
El dato de los 4 puntos en el último cuarto dan una idea del pobre bagaje que se pudo ver en Würzburg, aún así con un público entregado y sin parar de animar, La Marea Azul intentaba que sus chicas se metiesen en el partido, pero no fue el día.
Jornada negativa para las azulonas que tienen compromisos en breve donde los errores se pueden pagar muy caro, el sábado frente al Barça a domicilio, rival incómodo y peligroso, veremos lo que afectará esto al grupo y si hay una evolución en forma de resultados y juego, pero queda mucho trabajo por hacer y refuerzos por incorporar.
Esperemos que todo sirva para mejorar y progresar en la construcción de un equipo que por historia está obligado a jugar finales… y a ganarlas.
Javier Martín
📸 Reportaje gráfico Óscar Haro Twitter @garydeharo.
Euroleague Women Gameday 4
PERFUMERÍAS AVENIDA 53 (16+21+12+4): Silvia Domínguez (0), Bria Hartley (10), Andrea Vilaró (0), Alexis Prince (13), Laura Gil (5) -cinco inicial-, Olcay Çakir (6), Antonia Delaere (0), Sika Kone (16), Leo Rodríguez (3).
ZVVZ USK PRAHA 64 (15+22+18+9): Maite Cazorla (12), Emese Hof, (4), Ezi Mabegor (16), Veronika Vorackova (5) y Tereza Vyoralova (9) -cinco inicial-, Grabiela Andelova (0), María Conde (14), Nyara Sabally (4).
ÁRBITROS: Sonia Teixeira (Portugal), Suzana Vujicic (Montenegro), Cisil Güngör (Turquía).
