Mirotic de lío en lío, a veces sin buscarlo

La historia de Mirotic en el mundo del baloncesto está plagada de polémicas y de buenos partidos. Tras jugar en el Barça en su regreso de la NBA y hacerlo en el rival del club que le formó, el Real Madrid, ha salido del equipo culé por la puerta de atrás.

Tras rescindir el club blaugrana su contrato deberán ser los tribunales los que decidan lo que debe pagarle el Barça por los dos años de contrato que le quedaban. Ahora la polémica salta por su posible equipo futuro, donde los eternos rivales de Serbia se lo están disputando y puede que por eso mismo, no acabe en ninguno de los dos.

Ha sido el propio jugador el que ha anunciado que finalmente no jugará en Partizán de Belgrado por las amenazas e insultos que ha recibido por parte de la afición de Estrella Roja. Es una división enorme la que se ha generado en el país y eso ha hecho lo que ha decidido al jugador a tomar cartas en el asunto.

Mirotic ha emitido un comunicado en el que indica: «Se ha publicado información sobre mí y la continuación de mi carrera. A pesar de mi voluntad y de mis deseos, sin mi conocimiento y lejos de la verdad, se publican textos escritos al azar«. Ha añadido que «El público ha leído información sobre una continuación de mi carrera en el KK Partizan. Desde entonces he recibido amenazas e insultos que me han sorprendido, puesto que no quiero ser una persona que divida a nadie y menos en temas referentes a los colores de un club. He decidido no formar parte de esa atmósfera para no ponerme ni a mí ni a mi familia en problemas«.

«He de decir que ninguna amenaza ha venido desde el entorno del Estrella Roja, club con el que tengo buena comunicación y respeto. Del mismo modo, mi deseo de jugar en Serbia no estaba condicionado a ofertas económicas, sino que quería jugar en un país que amo. Las cosas no se han dado. Quiero agradecer al KK Partizan su confianza para intentar que formara parte de su equipo, pero creo que lo mejor para mí y para mi familia es continuar en un equipo ajeno a Serbia«, ha cerrado Mirotic. 

En este caso Mirotic no ha decidido ni ha afirmado querer jugar en ningún club y las amenazas nunca son justificadas sea cual sea el equipo en el que quiera jugar. Y en este caso se ha visto obligado a no poder jugar donde él ha elegido primero por un despido del Barça por un contrato que no obligó a firmar a nadie, y luego por no poder ir a un club debido a las amenazas de los jugadores del eterno rival.

La polémica persigue a Mirotic casi sin quererlo.