El pasado 4 de febrero, el Polideportivo Maloste FUE el escenario de la jornada 20 de la Liga Femenina Endesa. Tanto el IDK Euskotren como el Lointek Gernika Bizkaia tenían como objetivo escalar puestos en la tabla clasificatoria. La plantilla dirigida por Azu Muguruza se acabó llevando el derbi vasco por excelencia, tras un duelo caracterizado por la alta anotación e igualdad hasta el período de descanso (66-98). María España se convirtió en la gran protagonista del club con sede en San Sebastián, dejando así brillantes jugadas que deleitaron a la afición.
La alero mallorquina, de 30 años, asumió la responsabilidad anotadora en el cuadro donostiarra. Estuvo sobre el terreno de juego aproximadamente 23 minutos, en los que hizo una labor eficaz: registró 28 puntos, capturó 3 rebotes y repartió 2 asistencias para firmar un crédito de valoración de 33 tantos -según reflejan los datos oficiales, publicadas por la Federación Española de Baloncesto-.
El papel de María España en el IDK Euskotren va más allá de las simples estadísticas. Cuenta con virtudes tales como su capacidad de liderazgo -dentro y fuera de la pista-, carácter, sacrificio o entrega.