Se cumplieron los pronósticos y Purdue se enfrentará a Connecticut en la final de la NCAA. Los primeros acabaron con el sueño de North Carolina State mientras que Uconn se deshizo de una correosa Alabama. ¿Será capaz la Purdue de Matt Painter de plantar cara a la todapoderosa Uconn? Sí, pero creemos que no será lo suficiente como para poder arrebatarles el campeonato.
Hemos visto con nuestros propios ojos cómo una explosiva Alabama le jugaba de tú a tú a los Huskies haciendo un auténtico partidazo. Resultado: derrota por 14 puntos. El equipo de Dan Hurley es una auténtica máquina avasallando a sus rivales sin piedad. Mantienen la mayoría del bloque del año pasado y lo que es más importante: permanece intacta su solidez y mentalidad ganadora.
El tablero de ajedrez de Painter tiene como dama a Zach Edey: todo gira en torno a él. Por ahí pasa el partido y el campeonato. El coach de Purdue busca en todo momento que el gigante canadiense reciba el balón en las mejores condiciones posibles para crear ventajas. De hecho acaba de recibir por segunda vez el premio de jugador del año por Associated Press. Si los Huskies son capaces de minimizar su enorme impacto en el juego o cargarlo de faltas tendrán muchísimo ganado. Las ayudas deberán ser muy rápidas y efectivas, sin desdeñar la capacidad defensiva de su dominante center Donovan Clingan para poder pararlo. Se espera un bonito duelo entre ambos.
La batalla exterior y los porcentajes de tiro serán otros factores de peso. Ambos programas disponen de tiradores de nivel: Cam Spencer (Uconn) promedia 14,4 puntos por partido con un 48% de acierto desde el triple. Fletcher Loyer (Purdue) posee un 41%. En ese aspecto Purdue ha mejorado mucho su porcentaje de tiro de tres respecto al año pasado y Edey ha logrado cargarse menos de faltas, pero…¿será suficiente para parar el vendaval de juego huskie?
Bien es cierto que los boilermakers han pasado la dura prueba de fuego de Tennessee en el Elite 8, pero a medida que ha avanzado el Madness Uconn se ha mostrado intratable. No les importó que Alabama los machacase desde el triple, ellos siguieron con su plan de ruta y el martillo pilón a pleno rendimiento hasta lograr la victoria.
La experiencia de ambos podría ser clave en un entorno abrumador desde el punto de vista mediático: Purdue llega a su segunda Final Four de la historia (la primera fue en los años 80, muchos ni se acordarían en West Lafayette) mientras que Uconn ya ha ganado el torneo en 4 ocasiones.
Las casas de apuestas también dan como favorito a los de Dan Hurley. Esto es el Madness y todo puede pasar, pero los Boilermakers deben bordarlo en la pista para lograr el campeonato.
Lo veremos esta madrugada en el State Farm Stadium de Glendale (Arizona).
Pronóstico matealaro: Victoria de Uconn (+10)