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Con el baloncesto en su ADN, Celia García Paunero (Valladolid, 1995) mira a su pasado, presente y futuro.
Mate Al Aro: Cuéntanos brevemente tu trayectoria hasta ahora ¿Cómo empezó todo? ¿Cuándo te diste cuenta de que el baloncesto iba a ser una pieza clave en tu vida? ¿Tu mejor y tu peor momento como deportista durante tu carrera?
Celia García: «Soy hija de entrenador de baloncesto (Paco García) y de jugadora de baloncesto (Ana Paunero). Mi madre jugó en Primera División hasta que se quedó embarazada de mí. Mi padre es actualmente entrenador de LEB Oro con un montón de temporadas a su espalda. Yo empecé a jugar en Lugo cuando tenía cuatro o cinco añitos. He ido cambiando mucho de ciudad, sobre todo cuando era pequeña debido al trabajo de mi padre, y jugaba en las diferentes ciudades donde mi padre entrenaba. Cuando acabé mi etapa de formación (mis últimos años fueron en Ponce Valladolid) decidí irme a Estados Unidos a vivir una aventura. Sobre todo, decidí irme allí para ser capaz de compaginar estudios y deporte. Primero me fui dos años a un Junior College (Otero Junior College en Colorado, cerca de Denver) y luego ya di paso a la NCAA, la División 1, donde jugué dos años en San Antonio (Texas). Me gradué, acabé mi etapa de formación y ahí es cuando me surgió la oportunidad de dar el salto al baloncesto profesional y venir a España.
Nunca me he dado cuenta de que el baloncesto iba a ser una pieza clave en mi vida, creo que al final los diferentes caminos me han llevado a ello. Nunca pensé que iba a poder decir que vivo del baloncesto. Tampoco era una de mis prioridades. La prioridad siempre ha sido disfrutar e ir acumulando experiencias con ello.
Diría que mi mejor momento fue mi primera convocatoria con la selección absoluta de 3×3. Yo nunca había estado en selecciones nacionales y cuando me llegó esa llamada fue muy especial, un reconocimiento muy grande a todo el trabajo. Mi peor momento fue el momento en el que me tuve que operar de una lesión en el tobillo izquierdo el año pasado. Creo que las lesiones casi siempre son el peor momento para los deportistas».
MAA: ¿Una jugadora a la que admires?
CG: «Personalmente, admiro a Marta Xargay, es una jugadora que me encantaba ver de pequeña. Yo diría que es mi primer icono del basket, me gustaba mucho su juego y la seguía muy de cerca».
MAA: ¿Tienes alguna manía?
CG: «No las llamaría «manías», las llamaría «costumbres». A mí me ayudan a concentrarme en lo que es el plan de partido, lo que tengo que hacer. Me gusta organizar las cosas en su sitio: tengo unos calienta manos que me gusta llevar siempre encima. Sí que tengo ciertas manías con la ropa de jugar, los mismos calcetines… Yo creo que son ciertas costumbres que ayudan al jugador a concentrarse en el juego».
MAA: ¿Qué han supuesto para ti estos años en el Celta? ¿Qué sensación te llevas de esta última temporada? ¿Esperabas un nivel así en la nueva competición?
CG: «Para mí han sido unos años muy importantes. Creo que he crecido como jugadora en muchísimos aspectos, he mejorado un montón. De hecho tengo muchas palabras de agradecimiento a todo el cuerpo técnico de Vigo porque es un club que trabaja muy bien al jugador y focaliza muchos esfuerzos en mejorarlo individualmente. Yo salgo muy contenta. También creo que he crecido personalmente, he mejorado aspectos de liderazgo y de vestuario. Han sido tres temporadas y media muy especiales, cada una con lo suyo, años complicados con subidas y bajadas emocionales… Pero, en general, destaco mi etapa en el Celta como algo muy positivo en mi carrera deportiva. Esta última temporada para mí ha sido un tanto complicada porque volvía de la lesión, con lo cual me incorporé al equipo tarde. La liga la esperábamos muy competitiva y así ha sido, creo que es una liga muy atractiva y que también lo va a ser de cara al año que viene».
MAA: En 3×3, Azuqueca se ha convertido en el gran dominador de la temporada ¿Qué sensaciones tienes, sobre todo después de la reciente victoria en el Open de Marbella?
CG: «Azuqueca es un proyecto que surgió por el mes de febrero, cuando me llamaron Adrián Espárraga y Dani de la Rúa para hablar conmigo y ver si yo podía ser un poquito la cabeza visible del equipo femenino y encargarme de montar un proyecto competitivo. La verdad es que estoy muy orgullosa de lo que estamos consiguiendo, las sensaciones son muy positivas. Estamos compitiendo maravillosamente y nos están saliendo las cosas muy bien. Este pasado fin de semana conseguimos llevarnos el Open de Marbella y no solo eso, sino que también el domingo pudimos participar en el Máster Final de Castilla y León y también llevárnoslo. Dos torneos en 48 horas creo que es difícil de mejorar y creo que eso refleja todo lo que hay detrás del proyecto y todo lo que estamos trabajando».
MAA: ¿Qué ventajas consideras que puede aportarte el 3×3 para el 5×5? ¿Qué juego te gusta más?
CG: «Creo que el 3×3 es un juego muy rápido, con una toma de decisiones muy rápida. Eso me puede ayudar de cara al 5×5. Además, tener que defender tanto a pequeñas como a grandes en el 3×3 y ser capaz de sacar tiros más forzados y seguir trabajando con mi tiro exterior, que es uno de mis fuertes, también me puede ayudar. Son juegos totalmente diferentes, tienen aspectos comunes pero son difíciles de comparar porque las sensaciones que se viven en uno y en otro son muy distintas».
MAA: ¿Con qué jugadora no te gusta enfrentarte? ¿Y por qué?
CG: «Diría que no tengo ninguna jugadora a la que no me gustaría enfrentarme, todo lo contrario. Cuando jugaba en Liga 1 por ejemplo, me encantaba estar en pista con jugadoras de la talla de Silvia Domínguez, Laura Gil… Incluso compartir vestuario con Raquel Carrera en Vigo. Son momentos muy especiales porque es gente que llevas viendo jugar toda la vida, son referentes a nivel nacional y es muy especial tenerlos en la pista».
MAA: ¿Por qué Al-Qázeres? ¿Qué esperas que te aporte el club? ¿Qué puedes aportar tú al equipo? ¿Cuáles son tus objetivos de cara a la próxima temporada?
CG: «Estoy muy, muy ilusionada con el proyecto. Creo que es un paso muy importante en mi carrera deportiva y lo estoy tomando en la dirección correcta. Al-Qázeres es un club histórico que ha estado en motón de años en la primera división y creo que me puede aportar muchísimas cosas. Todavía es pronto para decir qué puedo aportar, estamos a principios de julio, el equipo se está haciendo y ya veremos por dónde puedo aportar. Lo que sí está claro es que voy a aportar todo mi esfuerzo en el día a día, e intentaré también ser una líder tanto dentro como fuera la pista. A partir de ahí pienso que está claro que mi versatilidad, mi rebote y mi tiro exterior podríamos decir que espero que sean importantes dentro del equipo. Los objetivos nos los marcará el entrenador cuando lleguemos y cuando se definan esos roles, pero yo creo que mi objetivo es disfrutar y mejorar en el día a día. En la competición está claro que hay que ganar el mayor número de partidos y conseguir los objetivos que se marquen, pero todo parte de ese disfrute del día a día».
MAA: Si no te dedicaras al baloncesto profesional, ¿Cuál sería tu profesión?
CG: «Tengo una carrera en Psicología, y en un futuro me gustaría enfocarlo hacia la psicología deportiva. Me encantaría seguir ligada al basket, no solo en ese ámbito sino además en una faceta de entrenadora que también me gusta mucho. A parte de eso me gusta la docencia, doy clases de inglés. También me parece que son campos interesantes».
