Tras el partido ante Real Madrid Baloncesto y con la mirada puesta en el Unicaja Málaga, Bilbao Basket recuperó este pasado viernes una costumbre muy necesaria de cara al acercamiento hacía la masa social del club. El club realizó una jornada de puertas abiertas en el entrenamiento recuperando una costumbre perdida con la pandemia.
Las gradas laterales del Bilbao Arena se llenaron con 1.200 espectadores, mayormente jóvenes, en una sesión de entrenamiento distinta al resto de la temporada. La plantilla de Jaume Ponsarnau comenzó con unos minutos en el gimnasio para después pasar a realizar ejercicios en pista. Allí, tras unos minutos de calentamiento los jugadores ejecutaron varios ejercicios que encandilaron a los seguidores más pequeños que no dejaron de animar como si de un partido oficial se tratara.
Tras la suave sesión los jugadores se dieron un baño de masas firmando autógrafos y sacándose fotos con los aficionados congregados en el evento. Además, el cuerpo técnico también tuvo su cuota de protagonismo con la «leyenda» Javi Salgado a la cabeza demostrando que la conexión entre afición y jugadores está muy viva.