En unos días donde el deporte femenino está en boca de todos, de la mano de la selección femenina, recientemente proclamada brillante campeona del mundo, una de esas mujeres casi pioneras por logros del deporte de la canasta ha alcanzado un hito histórico.
La gran Amaya Valdemoro se ha convertido en la primera jugadora española que ingresa en el Salón de la Fama de la FIBA en una ceremonia que se ha llevado a cabo en Manila, donde la madrileña ha compartido honores con jugadores de la talla de Yao Ming (China), Penny Taylor (Australia) o Yuko Oga (Japón) entre otros.
La exjugadora y actual comentarista de partidos en Movistar+ llegó a jugar cuatro mundiales con España y no se olvidó de dedicar este galardón a todas aquellas personas que le han marcado en especial a Elisa Aguilar, que parece que será la sustituta de Garbajosa en la FEB, y que ejerce como directora de competiciones de la misma.
Las declaraciones de Amaya han sido las siguientes:
«Este premio lo dedico a cuatro personas. A mi entrenador Miki Vukovic, que fue para mí un referente y el que más creyó en mí. A Elisa, con la que coincidí desde los 13 años y llevo toda una vida tanto deportiva como de amistad unida a ella, y con la que hemos vivido momentos importantísimos. Y, cómo no, también se lo dedico a mi padre y a mi madre, que ya no están con nosotros, y a toda mi familia, que siempre me ha apoyado. A mi madre la perdí con 18 años, y mi padre es la persona que más me ha apoyado y sin duda alguna ha sido el MVP de mi vida«.
Además se acordó de la ex entrenadora María Planas, a la que consideró una pionera del baloncesto español y que ya está en el Salón de la Fama desde el año pasado.
Merecido homenaje a Amaya que para muchas de las actuales jugadoras fue un referente por lo que consiguió como jugadora y que siempre ha defendido el baloncesto femenino como se merece.