Partido de ida correspondiente a las semifinales de LF disputado en Fontajau entre Girona y Avenida con gran ambiente en las gradas y el aliciente de meterse en una nueva Final como gran colofón de la temporada.
Es el clásico de los últimos años, siempre supone una motivación extra el enfrentamiento entre ambas escuadras, y con un premio bastante apetitoso para el que consiga llevarse la eliminatoria.
En el comienzo del partido las azulonas arrancaron muy bien y bastante centradas en realizar el plan trazado por N. Martínez con el fin de anular la puesta en escena de su homólogo R. Íñiguez .
Buenísimos minutos de Delaere que desbordaba una y otra vez a las catalanas, incapaces de parar el acierto y la buena defensa de las perfumeras, bien secundadas por la infalible Leo Rodríguez. Por esos momentos las charras mantenían un duelo igualado y de hecho se decantó de su lado a la conclusión del primer cuarto, 23-26 y muy buenas vibraciones.
En el lado gerundense, Margarity dejó muestras de su clase y el porqué ha cuajado una gran temporada en LF. Bien acompañada por Tolo, Nicholson o Mendy reflejando las «ganas» que se tienen que echar cuando te juegas algo tan importante .
Con el segundo cuarto la tónica fue la misma, mucha intensidad y bastante mejor para Avenida que llegó a marcar una diferencia a su favor de +13. Entraba casi todo, triples, transiciones, dominando los rebotes siendo Koné muy superior a las pivots locales, ello llevó a Íñiguez a parar el choque ante la dinámica que iba cogiendo el partido.
De repente cambió la tendencia, una defensa más agresiva por momentos al límite, pero obteniendo un gran resultado al detener la avalancha en que se había convertido el ataque salmantino. La experiencia de Ygueravide y el buen trabajo de las mencionadas Margarity y Mendy, volvió a acercarlas en el marcador teniendo a tiro a Avenida camino de los vestuarios (41-48).
Hasta ahí llegó todo, porque en la reanudación Girona se enfrentó a un equipo completamente distinto. Las perfumeras desaparecieron, no jugaron, quedando totalmente anuladas por un Girona que no se creía el regalo que les estaban haciendo las salmantinas. Tampoco hay que menospreciar el buen trabajo de un equipo que ha sufrido tanto durante este año, lesiones, bajas… como es el caso de las gerundenses.
El bajón de Avenida fue tremendo, meter los dos primeros puntos a falta de 2 minutos para terminar el tercer cuarto, es para hacérselo mirar. Cierto que la defensa de ayudas planteada por Girona daba buen resultado y bloqueó a las salmantinas que no enlazaban una sola jugada, facilitando a su rival seguir progresando y creer en sus posibilidades de llevarse el encuentro.
Inexplicable la forma de desaparecer del equipo, N. Martínez sin soluciones a pesar de intentar meter a sus jugadoras en el partido, las imágenes en el banquillo mostraban cansancio y abatimiento, realmente preocupante. La realidad era que un equipo como Avenida había metido únicamente 5 puntos en un tercer cuarto fatídico y con 10 minutos todavía por gestionar.
Había que aguantar y recomponerse, procurar cerrar esa herida que suponía haber cedido el mando al rival en esas condiciones de superioridad y motivación. No fue así, Girona olió la sangre y martilleó la zona perfumera hasta exprimir sus opciones al máximo, aumentando la distancia en el marcador a medida que pasaban los minutos.
A Íñiguez le salió bien su estrategia, manejó en la previa el miedo, transmitiendo a sus jugadoras la angustia que un equipo como Avenida padece ante este tipo de circunstancias. Se juega la parte más importante de la temporada y las charras tienen como entidad, la obligación de conseguir lo máximo, a veces las palabras sirven para bloquear a tu enemigo antes de enfrentarte a él.
Por su parte, la senda que recorrieron las salmantinas en el último cuarto fue continuista, sin ideas, llena de errores, sólo salvando la buena labor de Leo y (con menos protagonismo en la segunda parte) Delaere. Las diferencias ya oscilaban por los 10 puntos, con señales de tímida reacción, pero los tiros no entraban, las malas opciones y pérdidas constantes de balón eran la tónica, el rebote desde hacía muchos minutos también tenía dueño y ese era Girona.
Desastrosa segunda parte para las azulonas que les complica muchísimo su pase a la Final de LF porque la diferencia de puntos se antoja bastante difícil de recortar. El resultado 73-61 muy merecido para las gerundenses que lo trabajaron e hicieron una fantástica labor, es justo reconocérselo. Les da unas grandes opciones para conseguir el pase a la final y clasificarse para la Euroliga del próximo año, objetivo hasta hace unas fechas poco probable dada la situación anímica del equipo.
Aún queda un paso, el pesimismo anclado en la afición salmantina es evidente y no debe sorprender, pero a medida que se acerque el domingo el ambiente va a cambiar y si los imposibles son posibles eso solamente sucede en un lugar: Würzburg. Son 12 puntos, aún con Íñiguez enfrente esto ya lo hemos vivido muchas veces, veremos si sale cara o cruz.
Javier Martín
📸 Fotos CB Avenida
SEMIFINALES PARTIDO DE IDA LF
SPAR GIRONA 73 (23+18+16+16): R. Magarity (15), M. Mendy (6), L. Nicholson (12), M. Tolo (11), S. Ygueravide (7) -cinco inicial-, M. Canella (0), M. Bertsch (7), A. López (5), G. Labuckiene (10).
PERFUMERÍAS AVENIDA 61 (26+22+5+8): Arica Carter (5), Leo Rodríguez (16), Antonia Delaere (14), Sika Koné (10), Laura Gil (3) -cinco inicial-, Olcay Çakir (0), Andrea Vilaró (3), Alexis Prince (4), Bernardette Hatar (6).
ÁRBITROS: Francisco José Zafra Guerra, Antonio Manuel Zamora Rodríguez, Eva Areste Giralt.