Pido perdón. El baloncesto femenino va por el buen camino

Primero de todo he de pedir perdón. Como aficionado al basket reconozco que el baloncesto femenino lo tenía bastante aparcado. No sé el motivo o no sé explicarlo, pero no era algo que me atrajera especialmente. Pero como en esta vida siempre se aprende algo, esta vez he aprendido que el baloncesto femenino ha cambiado.

Tuve la suerte de asistir en directo al partido que disputaron Uni Girona contra Perfumerías Avenida, posiblemente uno de los mejores partidos que se puede ver en baloncesto femenino a nivel nacional y, porqué no decirlo, europeo. Dos equipos de empaque, con mucha fuerza y con jugadoras y entrenadores de gran nivel.

Podría afirmar que es el primer partido de baloncesto de tanto nivel que vivo en directo y la sorpresa fue tan agradable que, si me permitís decirlo, hasta a mi mujer que no le gusta el baloncesto, le gustó el encuentro y lo disfrutó incluso más, que el Joventut Badalona – Lenovo Tenerife que le «obligué» a ver el día anterior.

Ver la energía de Araujo en pista; la calidad de Silvia Domínguez cambiando el signo del partido; cómo se desplaza Rebekah Gardner por la pintura; como peleó Tolo contra dos grandes interiores como Fasoula y Reisingerova; como la afición con más de 4000 personas en Fontajau apretaban cuando era necesario…

Una suma de factores que me llegaron e hicieron que ese partido lo recuerde durante mucho tiempo y me haya quedado con ganas de más. Si a esto le sumamos que esta edición de la Liga Femenina Endesa es de las más igualadas de todos los tiempos, solo me queda de nuevo pedir perdón y declararme fan de una competición que seguiré con mucha más atención.

Además desde Matealaro estamos convencidos de que podemos ser una de las webs de referencia del baloncesto femenino con el apoyo de un modesto equipo, pero con una audiencia que queremos que crezca y nos sirva para llegar al lugar en el que queremos estar.

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