Hay jugadores que parecen eternos. Que para ellos no pasan los años y que cada vez juegan mejor. La experiencia se une a su calidad y esa mezcla hace de algunos jugadores dignos de ser considerados leyenda.
Uno de esos jugadores podría ser Vladimir Micov (Belgrado, Serbia), que a sus 37 años cuelga las botas y se retira tras una larga carrera, siempre jugando en algunos de los mejores equipos del viejo continente.
A través de su agente Misko Raznatovic ha emitido un comunicado en el nombre de Micov que dice lo siguiente:
«Durante los últimos 21 años, he tenido el privilegio de hacer de mi trabajo un juego, de ganar, perder, aprender, superar los límites y batir mis propios récords tras la derrota.
Ha sido un honor, un privilegio y un placer salir a la cancha y simplemente jugar al baloncesto. He tenido la suerte de trabajar codo con codo con algunos de los mejores entrenadores y jugadores que conozco.
Después de dos décadas, doce clubes, ocho ciudades y siete países, dejo el juego realizado y satisfecho. No me arrepiento de nada. Con esta última temporada, he cerrado el círculo.
Gracias a todos los que me han apoyado de alguna manera en cualquier momento».
Su mejor época o más recordada ha sido con CSKA y Milán, sin olvidar que jugó en Baskonia en 2009 y que su único título europeo lo logró con Galatasaray, cuando se llevó la Eurocup del 2016.
Un gran jugador, con un tiro de gran calidad que deja las pistas tras una carrera de más de 20 años como profesional