En Salamanca se vive un duelo, quien se fue sabe lo que dejó aquí, lo supo desde el principio, lo sabemos quienes analizamos al equipo desde hace mucho tiempo.
Avenida llegaba hoy a Würzburg con una dura prueba, Familia Squio tiene una escuadra bien armada con jugadoras de indudable calidad: Howard, Ndour, Zahui…
En el estreno de Pepe Vázquez como responsable técnico de Avenida, la afición respondió con cariño y confianza apoyando al equipo en esta nueva etapa.
Sin embargo no siempre los resultados tienen un final feliz y más si existen condicionantes que impiden progresar hacia los objetivos.
El equipo comenzó enchufado, con ganas de hacer bien las cosas, aparentemente concentradas y sabedoras de la importancia del choque.
En el inicio con una ventaja de 6-2, parecía que íbamos a ver un partido intenso y con las azulonas dispuestas a competir, fue un espejismo.
El conjunto italiano tras tres triples consecutivos, infligió un parcial de 0-11 y comenzaron a despegarse sin dar apenas opción a las locales.
Además la dureza e intensidad con la que disputaban cada jugada con permisividad arbitral, superaba el estado de ánimo de las salmantinas, quizás con la cabeza en otro sitio.
Por una parte el desacierto local y por otra el poderío físico de las visitantes, con un mejor planteamiento, lograron minar la moral de las perfumeras.
A pesar de los intentos, de Carleton y Fasoula, que lograron empatar el encuentro, finalmente terminó el primer cuarto con un 14-18 favorable a las italianas.
Reisingerova de las más activas, se la vió más enchufada, tuvo con Ndour un choque donde recibió un golpe, afortunadamente sin consecuencias.
Eso Astou lo acusó, ya que esa intensidad la llevó a acumular faltas y verse con 3 y más de la mitad del partido por disputar.
A Squio le costaba muy poco anotar, hasta 7 triples contabilizamos antes del descanso y Avenida ya por entonces sin apenas fuerzas «mentales» para hacer frente a tal avalancha.
Cuando acabó el segundo cuarto, las sensaciones eran malas, ya no sólo por la evidente superioridad de las contrarias, más bien por el estado de ánimo del conjunto charro.
De las cosas más positivas, como siempre la afición, demostró pese a las circunstancias que está con el equipo, aún en una temporada que se presume complicada.
Al regreso de vestuarios y pese al 28-43 en contra, tocaba reinventarse, defensa y más defensa, Fasoula como es habitual, de lo mejor, también Cazorla que lo intentó de todas las maneras, gran esfuerzo el de la canaria.
Pero hay otras jugadoras que llevan dentro mucha presión como Crvendakic, su desesperación la llevó a quedarse llorando en medio de la cancha.
Un gesto maravilloso de Pepe, arropó y animó a la jugadora serbia acompañado por una ovación de la grada.
Eso resume el estado en el que se encuentra Avenida, shock mental, no encuentran el camino, se les encoge el brazo, sin intensidad defensiva en momentos claves del partido, sin fe.
Pese a todo Avenida se rehizo mediado el tercer cuarto, con el pabellón volcado y creyéndose capaces de remontar, 43-55.
Y tuvieron sus opciones de atenazar al rival, con un ambiente totalmente volcado con las suyas, logrando que las italianas no anotasen durante algunos minutos, pero los errores en ataque, transiciones, precipitaciones lo hacian imposible.
Avenida no anota desde 6,75, ha perdido la efectividad que le caracterizaba estos últimos años, con estos mimbres es difícil hacer buenos cestos.
Demasiada ventaja para una escuadra la italiana, que aguantó el arreón de las azulonas, llegaron a ponerse por debajo de los 10 puntos y tras parar el partido apretaron de nuevo.
Se intentó, pusieron lo que tenían, pero no da para más y menos ante un rival que demostró calidad y cualidad.
Mensaje para las chicas: la afición está con vosotras, ayer se pudo ver con un ambiente emocionante, ante las dificultades lo más bonito es sentirte rodeado de gente, a quienes les importas más tu como persona, que los resultados.
Para la afición: genial, simplemente en la línea de lo que siempre fue la Marea Azul, correctos, cercanos y apoyando al equipo, esta es la esencia, enhorabuena!!!
Para la directiva: es un año duro, probablemente de los más difíciles en los últimos años, gran esfuerzo del presidente por estar ahí, no será fácil asumir nuestra situación, vendrán tiempos mejores.
Para los que se fueron: el barco sigue en pie, mal y con muchas averías de agua; ser capitán implica liderazgo, asumir un rol que a veces no nos gusta pero que es necesario.
El currículum de los de verdad, incluyen decepciones, hay que pensar que cuando se habla, se ha de ser consecuente e íntegro, abandonar por la puerta principal solo es patrimonio de los Grandes, eso hay que demostrarlo no sólo en tu trabajo, si no en lo personal.
Avenida perdió frente a Familia Squio 61-72.
Javier Martín.
