Gran triunfo el de Monbus Obradoiro ante el potente Barça, que no estuvo nada acertado desde el triple pero que preparó muy bien el partido y se aprovechó del acierto de los hermanos Scrubb y del buen hacer de Blazevic en la pintura, para sumar el cuarto triunfo de los gallegos en esta temporada.
Siempre las jornadas post Euroliga, que incluyen no pasar ni por casa son partidos peligrosos y eso que los locales tenían grandes bajas para este partido. Los de Jasikevicius parecieron desconectados en muchas fases de partido y no contaron con Kalinic ni Abrines que mermó la rotación exterior de los culés.
Los pupilos de Moncho Fernández empezaron muy enchufados pero de la mano del reaparecido Mirotic el Barça dio la vuelta al marcador para coger la primera ventaja en el partido. Pero la defensa culé no era de las que exige Saras, y los de Santiago seguían metidos en el encuentro.
Al final de los primeros 10 minutos la ventaja era de 6 puntos para el Barça, que lograba su máxima diferencia tras una canasta de Higgins. En ese momento Blazevic apareció para ajustar el marcador ayudado por la nueva incorporación de Obradoiro, Robertson que anotaba un triple para poner el 30-32 en el marcador.
El control era del Barça que se mantenía por delante al descanso (40-43) pero el ambiente entre los aficionados locales era de esperanza por meterle mano al conjunto culé por tercera vez en 25 enfrentamientos.
La vuelta del vestuario no sentó bien al Barça que empezó a fallas tiros y con un nivel defensiva bajo que permitía canastas fáciles a los nugaodrs de Obradoiro. Los Scrubb anotaban para poner la máxima ventaja de Obradoiro (57-52) y el Barça no encontraba la forma de pararlo viendo la posibilidad real de derrota.
El Barça empezó fallón el último cuarto, con fallo en 19 triples seguidos y veía como Obradoiro ampliaba la ventaja al 69-62, pero dos triples seguidos del Barça apretó el marcador y se puso a un solo punto (70-71). Con dos tiros libres de Laprovittola se puso por delante el Barça, pero Scrubb se jugó la última posesión gallega para lograr un 2+1 y dejar 5 segundos al Barça para la última jugada.
En ese tiempo el balón llegó a Mirotic que falló el último tiro y la victoria se quedó en Santiago por 76-74 ante la alegría de la afición local que empujó a los suyos hacia este histórico triunfo.
