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El Carpena de nuevo presentaba una gran entrada para forzar el quinto partido apoyando a Unicaja Málaga que se ha ganado este año todo el crédito del mundo con la consecución de la Copa del Rey y situando contra las cuerdas al Barça en esta serie tras superar de forma clara a Lenovo Tenerife en la ronda de cuartos.
El conjunto blaugrana, hoy vestido de color oro, ha salido consciente que tenía la oportunidad de sentenciar la serie tras el buen triunfo del tercer partido y no tener que volver a jugar contra Unicaja en el Palau. El acierto en el primer cuarto y la buena defensa han abierto brecha desde el salto inicial. La distancia llegó a los 10 puntos y el «plan de Ibon» de momento no resultaba (13-23).
La garra de Unicaja apareció en el segundo cuarto, pero el Barça no se pudo nervioso y a cada intento de acercarse de los malagueños respondían los de Jasikevicius con buenas acciones en ataque que solo dejaron recortar dos puntos a Unicaja en ese cuarto (37-45 min 20).
Necesitaba Unicaja Málaga un buen inicio del tercer periodo, pero el Barça no estaba por la labor de dejar escapar este partido y firmó su mejor cuarto con una defensa intensa sobre los jugadores locales, y con acierto en ataque tanto desde el interior como de sus jugadores exteriores.
El 15-28 de este parcial casi dejaba sin opciones a Unicaja Málaga y con pie y medio en la final al Barça que ha rotado a muchos de sus jugadores para que el ritmo no bajara a pesar del +20 que ha tenido durante muchos minutos en el último cuarto. Una técnica a Saras a falta de casi 8 minutos del final podía haber hecho cambiar el tono del partido pero no era el día de Unicaja.
Los jugadores de Unicaja se veían incapaces de meter mano al Barça y no recortaban más allá de los 14 puntos y la afición aprovechaba para homenajear a sus jugadores con cánticos de «Campeones de Copa» y cantando un himno que han disfrutado mucho este año con un equipo que ha dado un salto de calidad desde la reforma de casi toda la plantilla que se hizo en verano.
El Barça muy serio en toda la serie de semifinales, con cinco jugadores en dobles dígitos de anotación, se cita en la gran final ante el Real Madrid que superó también 3-1 a la Penya. El factor cancha es favorable al Barça y eso le da un punto de favoritismo sin olvidar que el Madrid es el actual campeón de Euroliga.
