Año en blanco y futuro incierto para Zion. Sus compañeros han hecho un buen papel en los playoffs pero la eterna lesión en su pie empezó a agotar la paciencia de su franquicia y de todos los fans. Aparentemente está recuperado 100% y con el alta bajo el brazo hace 5 días pero ahora debemos esperar a Octubre para verlo de nuevo en acción.
Están depositadas muchísimas esperanzas en él, tanto desde los Pelicans para aspirar a cotas más altas como en patrocinadores como Nike (tiene su propia línea de ropa y zapatillas y la multinacional de Oregón no lo hace con cualquier deportista)
La famosa rotura de su zapatilla con lesión incluida -que hizo perder a Nike más de 1.100 millones en bolsa- no fue impedimento para firmarle 7 años y 75 millones de dólares por cada uno de ellos. Este jugoso contrato tiene de nuevo a la compañía norteamericana en jaque ya que no pueden exprimir su imagen por la inactividad.
El “hype” que generó en 2019 el número uno del draft empezó a desvanecerse en 2021 por culpa de las lesiones. Su última temporada en activo promedió 27 puntos por partido y 7,2 rebotes, pero desde que está fuera de combate los rumores de salida de New Orleans o su aumento de peso (se rumorea que 10 kgs más de lo ideal) han contribuido a que no se le vea con buenos ojos.
En la ciudad de Louisiana no tienen totalmente clara su continuidad, ya que llegará en breve el momento de negociar la extensión de su contrato y su traspaso no está descartado según David Griffin, vicepresidente de la franquicia y que tendrá la última palabra al respecto. Las múltiples lesiones no convencen y apostar por el jugador nacido en Carolina del Norte puede tener un riesgo muy alto. Podrían garantizarle menos años o incluir una cláusula de salida para cubrirse las espaldas. El jugador no debería desdeñar esta oportunidad que le van a ofrecer debido a su último año en blanco, en el que ha cobrado unos 10 millones de dólares por agitar la toalla desde la grada. De hecho ha afirmado públicamente que aceptará dicha extensión. Veremos las condiciones exactas que le ofrecen.
Un jugador muy mediático – ya desde su primer y único año universitario en Duke -pero con muchas dudas respecto a su peculiar físico, que necesita un traje a medida para rendir al 100%.
