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El Barça ha demostrado hoy que la Liga Endesa merece poner todos los sentidos para no llevarte un disgusto. Y eso es lo que le ha pasado hoy ante un Unicaja (63-73) que venía dolido por su derrota en la Chamions Basketball ante Baxi Manresa y que, con un partido muy serio, se ha llevado una inesperada victoria del Palau.
El Barça tiene margen de error en la competición doméstica, y hoy lo ha demostrado con un partido muy malo en ataque, y con la sensación que lo importante está en el partido contra el Bayern de Munich, que no lo pondrá fácil a pesar de llegar como octavo de la Liga Regular en Euroleague.
Además, que el Barça no haya sido capaz de ganar ni un solo cuarto en su campo, demuestra que hoy no era su día y que lo tenía que aprovechar Unicaja, al que no hay que quitarle ningún mérito porque su partido ha sido digno de llevarse el triunfo ante el líder de la Liga Endesa y de la Euroliga. Puede que en difícil año de los malagueños eso sea al menos algo positivo que llevarse a la hemeroteca.
Con esta victoria, el sueño de Playoff para el Unicaja sigue vivo, y la mejoría de los de Ibón Navarro es evidente, a pesar de algún tropiezo que demuestra que tendrá mucho trabajo el año que viene pare rearmar este equipo y que vuelva a ser ese Unicaja competitivo que muchos conocemos.
Nicola Mirotic ha estado demasiado solo este partido y no han podido contrarrestar el gran partido de Brizuela con un pleno desde el triple (5 de 5) que comparado con el pobre 14% en triple del Barça es una losa muy grande cuando el partido parece que moleste en un calendario muy cargado.
Una mancha en la temporada culé que está centrado en asegurar el liderato de la Liga Endesa que no parece algo muy difícil si se centran, y el objetivo primordial es superar al Bayern para entrar en la Final Four donde están centrados todos los esfuerzos de los blaugrana este año.
