Los argentinos llegaban a este encuentro con los deberes cumplidos. La derrota de Brasil ayer frente la todopoderosa Estados Unidos, clasifica de manera directa a la seleccion blanquiazul para los Juegos Olímpicos del próximo año. Por su parte, la selección balcánica llegaba al encuentro con dudas en su juego, tras la sorprendente derrota sufrida de manos del combinado español.
El partido comenzó como se esperaba. La gran competitividad argentina hacía frente a el talento serbio. Campazzo llevaba la batuta del encuentro, dejado destellos de su gran calidad y comandando al equipo argentino que se vió durante todo el primer periodo por delante, para terminar con una canasta al límite del tiempo reglamentario de Deck y dejar el 25-23 en el luminoso.
En el segundo periodo y con gran acierto desde el 6,75 para ambos equipos, Argentina conseguía distanciarse en el marcador, pero sin superar la barrera de los diez puntos. Con la finalización del segundo periodo, los serbios consiguieron anotar para dejar la ventaja argentina en tan solo cinco puntos, 54-49.
En la reanudación del encuentro, el equipo argentino salió mucho mas enchufado. Volvia a estirarse en el marcador, pero poco a poco, tirando de oficio, y desde la defensa, los serbios recortadon distancia hasta colocarse a tan solo un punto en el marcador (68-67).
Un triple de Guduric ponía a Serbia por delante en los primeros instantes del último periodo, pero un parcial de 8-0 para los argentinos, les volvía a dar ventaja en el marcador. Los argentinos, con un Campazzo en modo en MVP, y con Laprovittola como perfecto escudero, se mantuvieron todo el tiempo resantante por encima del marcador para el final.
El Facu Campazzo ejercie como líder de una selección que se encomienda a su magia para generar juego. El base del Madrid, que esta en un momento personal espectacular, comanda el juego argentino y lleva ritmo de consagrarse como MVP del torneo.