Ja Morant es uno de los jugadores preferidos por los aficionados a la NBA. Es realmente vistoso, necesario y muy de agradecer que existan jugadores como él, un descarado saltarín sin miedo a las lesiones y siempre dispuesto a dar espectáculo cuando el balón cae en sus manos. Sin embargo la imagen que está dando a los fans -especialmente a los más jóvenes- dentro y fuera de la cancha por su inapropiada conducta, no es de recibo.
El base de Memphis ha aparecido recientemente mostrando un arma haciendo un directo de Instagram mientras estaba de juerga en un club nocturno con un grupo de amigos.
Este nuevo caso se produce tan solo tres días después de que el Washington Post informara de que Morant fue acusado de haber -presuntamente- golpeado y amenazado con una pistola a un chico de 17 años el pasado verano, según fuentes policiales.
Según el reglamento de la NBA no se puede viajar con ningún tipo de armas. Por si fuera poco el estado de Denver, lugar donde subió el vídeo, prohíbe llevar una si se está en estado de embriaguez. Las sanciones al efecto podrían superar los 50 partidos de suspensión y veremos si la NBA se atreve a llevarlas a cabo. De momento los Grizzlies lo han suspendido con al menos 2 partidos sin jugar.
Todo indica a que las compañías que rodean al jugador no parecen las más adecuadas, rodeado de un séquito de aduladores que supuestamente lo incitan a mostrar este tipo de comportamientos. Y no es el primero: en el Grizzlies-Pacers del pasado 29 de enero Morant tuvo un altercado en el tercer cuarto con el dominicano Chris Duarte y, al acabar el partido, el líder de los Grizzlies se encaró en la zona de los autobuses con unos miembros del equipo visitante.
El jugador nacido en Delzell (Carolina del sur) no procede de un entorno marginal (estudió en la universidad de Murray State un año y sus padres disponían de ingresos suficientes) por lo que extraña un poco estas actitudes macarras que le pueden llevar a graves problemas. Recordemos que Nike le ha confeccionado su propio modelo de zapatillas y a la multinacional de Oregon no le ha hecho ninguna gracia todo lo ocurrido.
De momento ha pedido disculpas públicamente y dice que espera mejorar en la “gestión de su estrés”. Por su bien y el del espectáculo de la NBA esperamos que el rookie de año 2020 logre asentar su cabeza.
