Este miércoles el Palacio de los Deportes de Riazor fue testigo de un encuentro digno de la NBA. Con un alto porcentaje de acierto y una escasa defensa, ambos equipos se dieron un festín previo a la cena de Nochebuena.
Ambos equipos llegaban empatados a victorias y derrotas en la clasificación y debían romper ese dato. La balanza cayó a favor de los locales dejando a los cántabros 10º con -3.
El partido fue un festival ofensivo de principio a fin. En ninguno de los cuartos los equipos bajaron de los 20 puntos. Con esta premisa, el primer cuarto terminó con un 24-22 en el marcador. Tras el primer tiempo, Básquet Coruña abrió brecha y anotó 33 puntos por los 20 de Cantabria. Yéndose ambos al descanso con un 57-42 en el marcador.
Tras el paso por vestuarios, Leyma Coruña no bajó el ritmo y fue quien de anotar casi 30 puntos (29) y dejar a Cantabria con 22. Sin embargo, el último cuarto fue un paseo anotador de Cantabria que metió el miedo en el cuerpo a jugadores y aficionados en Riazor. 31 puntos del conjunto cántabro; lo que dejaba un marcador final de 109 a 95.
Respecto a Alega Cantabria cabe destacar a Alejandro Marín. El jugador gaditano realizó su récord anotar personal con 28 puntos, de los cuáles 6/10 fueron triples. Además, dos ex Básquet Coruña como Bulic y Dago Peña anotaron 21 y 16 puntos respectivamente. Otro ex Básquet Coruña como Mikel Sanz realizó un partido más discreto con 4 puntos y 3 balones robados. También destacar al estadounidense Shakir Smith que anotó 7 puntos y repartió 5 asistencias.
Los herculinos, por su parte realizaron un juego colectivo muy rico en cuanto a anotación se refiere. 22/33 puntos de 2, 14/24 en triples y 23/26 tiros libres. Números buenísimos para un conjunto que venía con problemas en el tiro exterior sobre todo. Así mismo, destacar las 20 asistencias y los 29 rebotes.
A nivel individual, destacar a Aleix Font, Filipovic, Barrueta y Alejandro Galán. El jugador catalán cosechó un 100% de efectividad con 3/3 en tiros de 2 y 5/5 en triples. Esto supuso 21 puntos y 25 de valoración a pesar de sus 5 faltas. Por su parte, el base croata anotó 16 puntos y repartió 5 asistencias. Yunio «Papito» Barrueta fue quién de anotar 17 puntos con 3/7 en triples además de 4 rebotes.
Y, finalmente, la mención más especial se la lleva Alejandro Galán. El ex Alicante anotó la friolera de 14 puntos. Sin ninguna duda, el mejor partido del 57. Dentro de los 3/4 en tiros de 2, 5/6 en tiros libres y los dos rebotes; cabe destacar el 1/1 en triples. Un triple que puso en pie a toda la afición coruñesa que no daba crédito a lo que estaba viendo. Partido muy importante para el joven jugador de Badajoz.
Además, destacar el poso de Jakovics que sigue en su buena dinámica siendo un metrónomo para el equipo. También, Diagne fue el pívot agresivo que se esperaba en Coruña. Dando un paso adelante y anotando 10 puntos, 7 rebotes y 19 de valoración.
Las notas negativas se las llevan Javi Vega que no termina de encontrar su sitio esta temporada con tan solo 2 puntos y un juego pobre más allá de sus 3 asistencias; y Lotanna que se le sigue viendo frustrado tanto en defensa como en ataque. Tanto es así, que Diagne partió en el quinteto inicial. Lundqvist tampoco realizó su mejor partido con la camiseta naranja dejando 4 puntos y -2 de valoración.
Con todo esto y a pesar de las irregularidades, los gallegos cierran esta primera parte de la temporada en casa con 7 victorias y 6 derrotas (sin contar Albacete) y se encuentran 8º (dentro de Play Off).
El siguiente partido para los coruñeses será el 27 de diciembre frente a Albacete (fuera de casa). Ese será el último partido del año para Leyma Coruña y para la Leb Oro hasta el día de reyes.
Más allá del partido, hay que hacer una mención especial a uno de los atractivos principales del partido del miércoles: la Fiesta Peluche.
Y es que la afición coruñesa se volcó con la iniciativa del club y acudieron cientos de personas al Palacio de los Deportes de Riazor con sus peluches. Además, colaboraron colegios y clubes de baloncesto locales como Xiria (Carballo) o Golfiños (Sada). Cientos de peluches en favor de Cáritas cayeron a la pista. Una acción solidaria que vuelve tras la pandemia.