Hay días que fajarse en defensa da más que un buen ataque. La selección española sub18 ha dado buena cuenta de ello y ha dejado en solo 38 puntos a Serbia para colarse en la gran final del Europeo de la categoría.
Esa buena defensa ha cubierto el mal ataque de la selección que se ha quedado en tan solo 60 puntos, pero si concedes 38, la victoria está muy cerca como así ha sido. Durante todo el partido los jugadores han ejercido una gran defensa que le permitió abrir una renta en el segundo periodo que fue definitiva para el devenir de la semifinal.
Destacar de nuevo el gran papel de Izan Almansa que se fue a los 21 puntos y 12 rebotes en 23 minutos sobre el parqué. Ha vuelto a demostrar que no es casualidad haber sido nombrado mejor jugador del Mundial Sub17 y que si nada se tuerce, tiene pinta de ser clave en el futuro del baloncesto nacional.
La medalla de oro espera, pero no será fácil en una final que será contra la anfitriona Turquía con lo que supone tener a una afición volcada tan caliente como la turca.
