En el partido de ida entre Almansa y Lucentum los por aquel entonces visitantes derrotaron al conjunto Manchego con una canasta de Fran Pilepic en la última milésima.
En esta ocasión ha sido el lituano Jakstas en la que con una canasta en el último suspido ha permitido a los alicantinos derrotar al conjunto de Perelló en un partido marcado por la igualdad.
El duelo comenzaba con un intercambio de canastas entre los pívots de ambos equipos, Joey Van Zegeren y Robertas Grabauskas, que anotaron 10 puntos cada uno. El Holandés fue el único jugador del equipo local que vió aro desde más adelante de 6,75 durante el primer cuarto. El resto de puntos de los locales llegaron desde la línea de 3 puntos y desde el tiro libre. Por los visitantes Polanco secundaba a Grabauskas.
En el segundo cuarto Almansa abrió una distancia de 8 puntos, con un Dimakopoulos llevando la voz cantante con 2 triples pero dos triples de Matiulionis y uno de Pilepic permitió al Lucentum darle la vuelta. El acierto desde la línea de 3 de los locales era grande. Finalmente se llegó al descanso con 3 arriba para los de Gonzalo García. La igualdad predominaba.
En el tercer cuarto la aparición de Heart y la dirección de Noguerol más los puntos de Van Zegeren, hicieron al Lucentum despegarse minimamente en el marcador, pero Almansa nunca le permitía romper el partido.
Y en el último cuarto cuando parecía que el Lucentum , de la mano de la dirección y puntos de Pedro Llompart podía escaparse, apareció un gran protagonista: Josep Pérez. El base valenciano con tres triples consecutivos puso a Almansa a un punto y Polanco completó la remontada. Desde ese momento siguió la igualdad pero con ventajas ligeras para Almansa, mientras Jakstas mantenía al Lucentum con opciones.
Y llegamos a las últimas jugadas. Grabauskas tras un palmeo colocó a Almansa dos puntos arriba a falta de 15 segundos. Tras pedir Tiempo Muerto, el Lucentum buscó en la última jugada a Van Zegeren que a falta de 9 décimas recibió una falta que los árbitros entendieron como antideportiva. El holandés sólo anotó uno , pero en el saque de banda le llegó el balón a Jakstas que sobre la bocina metió la canasta que tras una delibberación del trío arbitral acabó siendo válida provocando la euforia en los jugadores locales y en la grada y dejando a Almansa de nuevo con la amarga sensación de habersele escapado una victoria que tuvo en sus manos.