Empezar un torneo y en un pabellón vacío siempre se peligroso, pero España, con un juego rápido y divertido, ha superado claramente en todas las facetas a Bulgaria que no ha podido entrar en el encuentro en ningún momento.
El hasta hace poco cuestionado Lorenzo Brown fue el mejor de la selección junto a Willy Hernángomez que dominó la pintura y demostró que será una pieza clave en este equipo.
El primer partido en Tbilisi mostró el camino que debe tomar la selección si quiere llegar lejos. Es cierto que Bulgaria no es de las selecciones potentes, pero siempre es bueno empezar con un triunfo que alimente la ilusión y la confianza de un conjunto que deberá crecer a lo largo del torneo.
Un parcial en el primer cuarto de 12-0 hizo que se rompiera el marcador y solo Vezenkov parecía capaz de hacer que los suyos tuvieran algo de esperanzas. Nada más lejos de la realidad.
La maquinaria de Scariolo ha funcionado a la perfección y poco a poco la diferencia se fue a más de 20 puntos y con anotaciones altas por parte de España que en todos los cuartos superaron los 25 puntos.
La selección no bajó la intensidad y todos los que participaron anotaron y es una gran noticia para un equipo falto de un líder nato. Brown con 17 puntos lideró el ataque con hasta 7 jugadores en dobles dígitos de anotación.
Al final la diferencia se fue a los 27 puntos y ahora a espera al siguiente rival para demostrar que este es el camino en esta primera fase donde la dificultad de los rivales irá en aumento.
Ficha técnica
114 – España (28+29+32+25): Brown (17), Jaime Fernández (12), Juancho Hernangómez (13), López-Arostegui (5), Willy Hernangómez (16) -cinco inicial-, Rudy Fernández (14), Pradilla (10), Sebas Saiz (-), Garuba (10), Parra (5), Díaz (5) y Brizuela (7).
87 – Bulgaria (17+18+31+21): Alipiev (-), Stoilov (12), Marinov (9), Vezenkov (26), Bost (6) -cinco inicial- Kostov (13), Andrey Ivanov (-), Pavlin Ivanov (16), Karamfilov (-), Dimitrov (5), Simeonov (-) y Yanev (-).
