Una de las cosas que posiblemente más guste en la NBA, es que en fechas navideñas juegan partidos de los más interesantes, intentando que en estas fechas se disputen partidos atractivos tanto para el espectador que va al pabellón como para el espectador que lo ve desde casa.
En estas fechas la ACB descansa y la duda que surge es si debería también jugar partidos en estas fechas, aprovechando que los más jóvenes tienen vacaciones y podrían acercar el baloncesto a aficionados del futuro que con sus padres seguro que irían a los pabellones en estas fechas señaladas.
Seguro que a los jugadores no les haría mucha gracia, por lo cargado que está el calendario y porque son fechas en las que aprovechan para estar con sus familias celebrando las fiestas navideñas, pero la afición lo agradecería y sería un paso más de acercar a los clubes a los más pequeños de la casa.
La NBA es un ejemplo de merchandising, donde prima el espectáculo por encima de muchas cosas y donde el aficionado se puede decir que es el que manda y demanda este tipo de partidos en días de fiesta. El calendario está repleto de partidos, y meter un par más a estas alturas de la temporada cargaría más aún a los equipos, sobre todo si juegan competición europea.
Es un tema que seguramente no guste a los jugadores, pero si realizamos una encuesta por aficionados seguro que están de acuerdo en poder ir a llenar los pabellones y vivir en pabellones repletos de niños partidos de gran pasión. Si se organizara un Barça – Madrid seguro que tendría una gran audiencia. O un Baskonia – Valencia llenaría el Buesa Arena. O un derbi gallego entre Obradoiro y Breogán llenaría las calles de la ciudad gallega donde se jugara de un ambiente espectacular.
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