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La travesía de los andorranos por Europa se acaba aquí. Los de Óscar Quintana se vieron claramente superados por un Bursaspor liderado por Andrew Andrews y Kevarious Hayes. El único momento de lucidez por parte de los locales se vio en el primer cuarto. El resto del encuentro fue un monólogo otomano, ante el que nada pudo hacer Morabanc Andorra. Quedan así eliminados de esta Eurocup tras plantarse en semifinales como una auténtica sorpresa.
Ambos conjuntos comenzaron el encuentro con su estilo de juego habitual. La estrategia inicial de Bursaspor fue tirar triples rápidos para sorprender a la defensa andorrana. Por su parte, Andorra se centró en practicar una defensa sólida y en mover la mucho la bola para encontrar espacios en territorio turco. El resultado fue un contundente parcial 17-6 para los locales a ritmo de Clevin Hannah y Oriol Paulí. El catalán fue muy dañino para su rival en las penetraciones a canasta. Anotó 10 puntos en los primeros 10 minutos. El técnico de Bursaspor se vio obligado a pedir tiempo muerto para enmendar la situación. Los suyos se reactivaron y a hombros de un gran Andrew Andrews consiguieron remontar. Un triple sobre la bocina del americano puso el 20-22.
Los primeros compases del segundo cuarto destacaron por la intensidad defensiva. Hasta dos minutos y medio tuvieron que esperar los espectadores para ver la primera canasta de este periodo, que fue de los turcos. Bitim se sacó de la chistera un espectacular giro de 360 grados para entra en la pintura y machacar el aro. Segundos antes le puso un tapón en el otro lado de la pista a Diagne. Los fallos impidieron a Bursaspor ampliar su ventaja, lo que aprovecharon Jelinek y Llovet para adelantar a Andorra con dos triples consecutivos. Andorranos y turcos se intercambiaron golpes, hasta que un triple de Dudzinski empató el encuentro y comenzó un parcial de 0-7 para dar la ventaja a los visitantes al descanso; 34-38.
Los turcos volvieron de la pausa con la convicción de querer llevarse el partido. Cuatro de sus primeras cinco canastas en el tercer cuarto llegaron desde el perímetro. En ausencia de Andrews, se valieron de Needham y Hayes para mantener el ritmo frenético de anotación que buscaron desde el principio. Un Andorra atascado vio cómo su rival se escapaba en el marcador y la desesperación comenzó a hacerse dueña de sus jugadores. Los hombres clave como Hannah o Crawford no lograron dar un paso adelante para reducir la desventaja. Sí lo dio Miller-McIntyre. El americano estaba haciendo un partido muy discreto pero asumió galones y enchufó un triple que reactivó a los suyos. La máxima diferencia de 17 se redujo a siete puntos.
En el acto final, Bursaspor disipó todas las dudas y terminó de apear a Andorra. Un parcial de 4-12 alejaba a los turcos una distancia de 18 puntos, prácticamente insalvable. Andrews llegó a los 20 puntos tras un genial encuentro y Kevarious Hayes bailó como quiso a los de Quintana. Paulí y Crawford pelearon para maquillar un poco el marcador, pero los visitantes no levantaron el pie del acelerador hasta que sonó la bocina. Fin a la aventura europea de Andorra y vuelta a la dura y crítica realidad que vive el club actualmente. Ahora deben poner todos sus esfuerzos en salvar la temporada manteniéndose en Liga Endesa, reto que se antoja complicado.
Oriol Paulí se llevó un mérito de consolación por ser el MVP del partido. El gerundense sumó 28 en valoración tras anotar 16 puntos, recoger nueve rebotes y repartir cinco asistencias. Tuvo momentos de desconexión, pero fue el más regular en un encuentro en que sus compañeros poco pudieron hacer ante un gran rival. Hayes fue un auténtico dolor de cabeza para Andorra. El estadounidense anotó 11 puntos y atrapó 16 rebotes para dejar sin segundas oportunidades a los locales. Alcanzó los 27 en valoración.
